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viernes, 5 de octubre de 2012

TODO ESTE SILENCIO Realizar alguna actividad. Pensaba en ello, en hacer algo. Fingir que hacía algo al menos, que es también hacer algo. PENSABA en que estados depresivos llevan a estados depresivos, concentración. La clave estaba en concentrarme en algo, en Oriente la gente se concentra, incluso en su respiración. CONCENTRACIÓN, pensaba que la clave estaba en la concentración, pensaba en ello, sólo en ello. Pero concentración era una palabra. Cuando piensas en algo acabas pensando en la forma que nomina el objeto y luego en el objeto y despues en su causa, nunca en su esencia. Oriente es la causa, no...es la esencia...¿y el objeto? TODO ESTE SILENCIO NADA QUE TURBE MI ARMONÍA INTERIOR ¿Y a qué me debía? ¿Es extraño o extraordinario? Simplemente el dominio de mi paz esencial, dominio de mi alma, desde algún lugar de mí mismo, en la profundidad. Estados de la mística, conectados, conectados al equilibrio, conectados a algo, simplemente esencia, y esa idea brota, pero el ego la reconoce y la tiene por mérito y el ego crece y meditas para no ser nada y acabas siendo presa de tu orgullo, algún sentido tiene. Algún sentido tiene que querer saber conduzca a un estado de soberbia, ese encuentro. Estados de conciencia, llegar a un lugar y ser el amo, Poder, pero todo es una ilusión, nace del complejo y el complejo nace de la falta de Poder, no hay Poder y quieres tomarlo.

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